Torres-Dulce dice que cualquier reforma debe impedir perder a los menores en el "despeñadero" de la jurisdicción adulta

{MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -}
El fiscal Eduardo Torres-Dulce, propuesto por el Gobierno para ser el nuevo fiscal general del Estado, ha señalado que cualquier reforma que el Gobierno vaya a emprender en la Ley del Menor debe impedir que los menores se pierdan en el “despeñadero” de la jurisdicción adulta.
El actual fiscal de Sala del Tribunal Constitucional ha comparecido en el Congreso en cumplimiento de los requisitos señalados sen el artículo 29 del Estatuto Fiscal, para obtener el aval de las cámaras tras ser informada su propuesta favorablemente por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
En su intervención en la Comisión de Justicia del Congreso, Torres-Dulce señala que el artículo 25.2 de la Ley del Menor prevé que las penas tengan en cuenta su reinserción y rehabilitación social “para que ese menor que ha superado las líneas rojas de convivencia social no se pierda en el despeñadero de la jurisdicción penal de mayores”.
Así, ha insistido en varias ocasiones en que hay que ser “prudente” con cualquier modificación que vaya a emprenderse en la materia, que siempre tiene que tener como fin la mayor protección del menor.
De igual forma, recuerda que España ha suscrito en varias ocasiones acuerdos internacionales sobre protección de menores, como las reglas de Pekín, un convenio internacional que acota la jurisdicción de menores. “Hay que ser respetuoso con los convenios y más si son internacionales”, ha apostillado.
A su juicio, la reforma introducida en su momento en la reforma de la ley penal del menor está “funcionando razonablemente bien” y precisamente esa experiencia del Ministerio fiscal cree que puede ser utilizada como una “experiencia práctica”, ante la posible nueva reforma del proceso penal.
En esta línea, ha indicado que “evidentemente” la mayor parte de los problemas en la materia versan sobre la penología de las infracciones cometidas por los menores.