Los CIE europeos vetan la entrada a los periodistas y a los ciudadanos

{Marta Arroyo | Madrid
Actualizado jueves 26/04/2012}
Los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE) europeos seguirán siendo, por el momento, coto vedado a ciudadanos y periodistas a excepción del de la Zona Franca de Barcelona, al que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, realizará una visita el próximo lunes, en la que también se permitirá la presencia de periodistas.
En el marco de la campaña ‘Open Access: ¡Abrid las puertas! ¡Tenemos derecho a saber!’, que comenzó el pasado 26 de marzo y finaliza este jueves, las redes >Migreurop, Alternativas Europeas/European Alternatives y Periodistas Sin Fronteras han solicitado visitar los centros de inmigrantes de su región. La respuesta a las peticiones formuladas para que informadores, asociaciones y colectivos ciudadanos pudieran entrar para entrar en estos recintos temporales de confinamiento ha sido prácticamente unánimes: “No se puede atender su petición”.
{{Recintos ‘impenetrables’}}
Las razones de ese rechazo han sido dispares: En Francia, la entrada a los Centros de Retención Administrativa (CRA) de Mesnil-Amelot, Palaiseau, Rennes, Vincennes, Toulouse-Cornebarrieu y Estrasburgo, así como a la zona de espera de Toissy, ha sido denegada a los informadores, incluso a pesar de que estos últimos acompañaban a un parlamentario (los cuales gozan de un derecho de acceso incondicional).
El centro de Palaiseau, donde según Alternativas Europeas un interno prendió fuego a su habitación y se intentó suicidar, ha dicho no por estar el país en “periodo electoral” y ha aludido al “deber de reserva”.
En otros, como el de Cergy, las solicitudes han quedado sin respuesta.
En Bélgica, las autoridades competentes no han permitido a la Liga de Derechos Humanos visitar el centro cerrado de Brujas con 5 periodistas. Basan su negativa en el artículo 40 de la orden real de 2 de agosto de 2002 según el cual “los residentes no pueden ser expuestos a la curiosidad del público”.
En Italia, la petición de visita hecha por varios actores locales al campo de internamiento de extranjeros (CIE) de Milán ha sido rechazada por “riesgo de revuelta”. Los abogados de los detenidos han sido acusados de ser el origen de la revueltas que estallaron el pasado mes de enero.
En España, se formuló una petición para acceder al CIE de Valencia, la cual no ha tenido respuesta. En Barcelona, la Delegación del Gobierno denegó al Síndic de Greuges su petición de entrar al CIE de Zona Franca, donde en enero murió un interno y actualmente hay tres en huelga de hambre por presento maltrato. Posteriormente, Interior ha autorizado la asistencia de periodistas en la visita que Jorge Fernández Díaz realizará el próximo día 30. Durante la misma, el ministro explicará “las líneas generales del nuevo reglamento que regulará el régimen de organización y funcionamiento de estos centros”, según la web del ministerio.
Los promotores de la campaña ‘Open Acces’ critican la impenetrabilidad de estos centros, objeto de numerosas denuncia de maltrato a los internos, y se preguntan ¿qué intentan ocultar? En su opinión, esta opacidad propicia vulneración de los derechos de los detenidos y viola el derecho a la información.
Por ello exigen un acceso abierto de estos lugares, por los que pasan cada año 600.000 personas en situación irregular.